Preparar a sus hijos para un día completo de aprendizaje comienza con un desayuno nutritivo. Todos sabemos qué tan agitada puede ser la mañana. Usted tratando de tener a sus niños listos para la escuela mientras tanto se arregla para salir. A veces, puede ser más fácil hacerlos comer una rebanada de pan tostado o darles comida rápida en vez de tomarse el tiempo de hacer un desayuno casero. Con algo de planificación y unas elecciones inteligentes, el desayuno puede ser muy fácil de hacer.
Si se encuentra corriendo demasiado en la mañana, trate de hacer el desayuno la noche anterior. Muchos de estos platos quedan perfectos al recalentarlos el día siguiente. ¡Algunas opciones puede hacerse incluso con una semana de anticipación! Esperemos que esto ayude dándole algo de tiempo para poder tener a sus niños vestidos y listos para afrontar el día.
Aquí abajo 10 fabulosas opciones de desayunos para sus hijos.
1. Avena Casera
La avena es una gran opción para el desayuno. A sus hijos les encantarán los sabores reconfortantes de este alimento. Omita la avena altamente procesada que viene en porciones individuales. Cocinar la avena desde cero es rápido y sencillo. La avena entera es la opción la más saludable porque es la menos procesada. Sin embargo, toma un tiempo de cocción más largo. Remoje la avena durante la noche anterior para hacerla cocinar rápidamente. También puede hacer un gran lote de avena el fin de semana y porcionarla para los días de la semana.
2. Huevos
Los huevos son un desayuno increíble para los niños. Los llenará de proteína y mantendrá satisfechos toda la mañana. Los huevos revueltos son una manera rápida y sabrosa de desayunar en la mesa. Si usted está muy presionado por el tiempo, considere hervir los huevos la noche anterior. Un huevo duro es considerado una comida rápida porque los niños pueden comerlo mientras corren hacia la puerta. Una pequeña pizca de sal y pimienta es todo lo que se necesita para condimentar esta saludable comida. Sírvalos con una rebanada de pan tostado para hacer una comida completa.
3. Panecillos de Salvado y Avena
Los panecillos son generalmente muy poco saludables. ¡Un panecillo típico comprado en la tienda podría tener más de 1000 calorías! Lo bueno es que son fáciles de hacer por usted mismo. Busque una receta de salvado de avena y reemplace el aceite con salsa de manzana. Esto le agregará una humedad increíble manteniendo bajas las calorías. Añada la fruta favorita de los niños y aderezos, como frambuesas y nueces. Los panecillos de desayuno son una opción inteligente para las mañanas ocupadas ya que los niños pueden comerlos en su camino a la escuela.
4. Batidos de Fruta Real
Si a sus hijos no les gustan comer desayuno, pruebe una bebida de desayuno en su lugar. Muchos niños sienten náuseas en la mañana ya que sus cuerpos no están diseñados para despertar tan temprano y llegar a la escuela. Los batidos de desayuno son una forma increíble de nutrirlos y darles la energía que ellos necesitan para el largo día que tienen por delante. Mezcle frutas congeladas con yogur, leche o jugo. ¡Puede hasta ponerle un vegetal o dos sin que ellos lo noten!
5. Yogurt con Granola
El yogur es una gran manera para que los niños obtengan suficiente proteína temprano en el día. El yogur griego es espeso y lleno de proteínas y calcio. Es una mejor elección que algunos de los otros tipos de yogur que pueden tener cantidades muy bajas de proteína. Endúlcelo con un poco de miel y póngale granola y fruta fresca. Tenga cuidado al comprar o al hacer la granola – es fácil que ésta tenga un alto contenido de grasa ya que es horneada con mantequilla o aceite. Busque variedades bajas en grasas y compruebe siempre la etiqueta de información nutricional.
6. Fruta con Queso Cottage
Otra opción para un desayuno suave es el queso cottage con fruta. A sus niños les encantará el sabor dulce mientras obtienen suficientes proteínas del queso. El queso cottage puede ser bastante alto en calorías y sodio, así que compruebe la etiqueta de sus marcas favoritas. El queso cottage también es un gran aderezo para las tostadas o huevos. Puede fácilmente hacer una ensalada de frutas el fin de semana y servir porciones de ésta a lo largo de la semana al desayuno. Sólo sabrá mejor a medida que pasen los días. Sin embargo, no lo guarde por más de una semana completa debido a que la fruta podría empezar a descomponerse.
7. Envuelto de Banano y Mantequilla de Maní
Si a sus hijos no les gusta la mantequilla de maní ni los sándwiches de banano, intente con un envuelto. Los envueltos o wraps son divertidos para comer y hacen un gran cambio al desayuno normal. Busque las variedades de envueltos de trigo entero para tener mayor contenido de fibra y proteínas. Usted puede hacer una variedad de envueltos diferentes basados en las preferencias de los niños. Ponga huevos con salsa dentro de un wrap para hacer un desayuno mexicano. Use rebanadas de manzana con queso y yogur para darle un toque dulce.
8. Panecillos Ingleses Integrales
Los panecillos ingleses son un elemento básico del desayuno clásico, pero siempre podemos hacerlos más saludables. Los panecillos ingleses integrales son tan deliciosos como las variedades blancas, pero están llenos de más fibra y nutrientes. Algunos fabricantes ofrecen productos de trigo integral blanco que se ven igual que las marcas favoritas de sus hijos. Póngale a su panecillo inglés mermelada libre de azúcar y mantequillas naturales. Podría estar salvando a sus hijos de azúcar extra y preparándolos para un día saludable.
9. Tortilla
Una tortilla puede parecer a sus hijos como una opción para adultos, pero es una gran oportunidad interactiva. Si usted tiene algunos minutos extra en la mañana, deje que sus hijos ayuden a decidir de qué se llenará su tortilla. Haga aderezos que les gusten a los niños, como rodajas de pepperoni, queso suave y esconda ahí algunos vegetales a la parrilla. Los desayunos con tortilla llenan bastante y son bajos en calorías y altos en proteínas. Las fittatas también son una elección divertida.
10. Sándwich de Huevo Casero
Este favorito de las comidas rápidas de restaurante no es en realidad bastante saludable. Sin embargo, en su casa es una buena opción para ahorrar dinero y aumentar la buena nutrición. Comience con una rebanada de pan integral y cúbrala con un huevo frito y unas lonchas de queso. Este es un desayuno perfecto para un niño mayor cuando están un poco tarde para la escuela. Lo pueden comer sobre la marcha sin tener que sentarse en una mesa. Usar un panecillo integral agregará más fibra y nutrientes a la comida.