La primera vez que escucha a su bebé llorar es un alivio porque significa que ha llegado al mundo ¡saludable y emocionado! Sin embargo, si el bebé no deja de llorar por las noches, lleva semanas o meses sin parar, los padres a menudo quedan desorientados y exhaustos, sin saber qué diablos hacer.
Ahora bien, cada bebé es diferente; algunos gritan porque tienen hambre, otros porque están mojados, otros porque tienen gases o porque simplemente sienten frío. Sin importar la razón, si su bebé llora sin parar y lo mantiene despierto durante toda la noche, los siguientes diez consejos pueden ser muy útiles para ayudar a calmarlo y a arrullarlo hasta convertirlo en un ángel que duerme pacíficamente…
1. El Silencio
Susurrar dulcemente al oído de su bebé a veces es un gran truco, especialmente si le hace sonidos calmantes para tranquilizar su llanto.
2. Trabaje con la Gravedad
A veces los gases son los culpables de que el bebé esté quisquilloso y sostenerlo boca arriba puede ir en contra de la gravedad y del proceso digestivo. En cambio, gire al bebé sobre su estómago, mirando hacia abajo sobre su antebrazo para aliviar el dolor de los gases.
3. Llévelo a Dar un Paseo
En el vientre, los bebés se acostumbran a moverse junto con sus madres. Puede imitar ese movimiento metiendo al bebé en su coche y yendo a dar un paseo alrededor de la cuadra.
4. Duérmete Niño
Mecer suavemente al bebé mientras se lo acurruca puede ser suficiente para arrullarlo y hacerlo dormir.
5. Envuelva y Acurruque a su Bebé
La sensación de estar envuelto en una manta o cobija imita la sensación de calidez y comodidad dentro del vientre de la madre y es así como se puede consolar rápidamente a un bebé asustado o friolento.
6. Pruebe con un Chupete
Lo último que necesita un bebé con cólico es más comida. Sin embargo, succionar un chupete a menudo lo calmará lo suficiente como para que se quede dormido. El chupete también le permitirá protegerlo del síndrome de muerte súbita (SMS) mientras duerme.
7. Masaje Suave
El poder calmante del tacto de los padres hace magia en un bebé inquieto. Solo piense en lo bien que usted duerme después de un masaje de pies, manos, espalda o estómago.
8. Ruido Blanco Constante
En el vientre, el bebé está rodeado por un ruido blanco y calmante. El mundo real puede ser bastante impactante y aterrador para la criatura. Así que encienda la lavadora de platos o un ventilador para que haga un ruido bajo constante y reconfortante que opaque las cosas aterradoras.
9. Aliente un Eructo Satisfactorio
Los bebés tragan un montón de aire cuando se alimentan por medio del seno o de los teteros, lo que puede causarles gases y hacerlos sentir incómodos. Sin embargo, ayudarles a que eructen mediante unas suaves palmaditas en la espalda mientras apoya su cabecita sobre su hombro y sostiene su cuello puede fomentar un eructo satisfactorio y favorecer el proceso de digestión.
10. Hable con el Pediatra
Si, en su opinión, el bebé llora demasiado, no lo ignore — pídale consejos a su pediatra y haga examinar a su hijo en busca de problemas médicos subyacentes. Confíe en mí; le dará tranquilidad.