Con tantas responsabilidades laborales, familiares y sociales, cada vez se hace más difícil encontrar tiempo para cocinar menús caseros y elaborados. Por esta razón, muchos recurren a la comida rápida o prefieren saltearse comidas.
Sin embargo, con un poco de previsión, podrá disfrutar de almuerzos o cenas exquisitos cada vez que llegue a casa del trabajo (o también puede llevarlos a la oficina). A continuación, le presento siete recetas fáciles de preparar que pueden congelarse o refrigerarse sin correr el riesgo de que pierdan su sabor original…
1. Filetes de pechuga de pollo
El pollo es un tipo de carne magra y liviana que se jacta de aportar grandes cantidades de proteínas. Además, puede refrigerarse o congelarse sin problemas y recalentarse en el microondas (en modo descongelado) o dejarse sobre la mesada un par de horas para disfrutar cuando regrese de la oficina.
Cocine la carne en la parrilla o el asador a temperatura media-alta y recuerde darla vuelta con frecuencia para asegurarse de que se dore de forma pareja. Las pechugas de pollo deshuesadas son perfectas para este menú y no necesita más de 20 minutos para prepararlas. También puede filetearlas para que quepan en su lonchera y acompañar con frutas y vegetales a elección.
2. Macarrones con queso
Esta receta fue sacada de RealSimple.com y estoy seguro de que satisfará el apetito tanto de padres como de niños. Al ser tan fácil de preparar, tiene la opción de congelar las porciones (hasta por 3 meses) una vez que todos los ingredientes estén juntos o de disfrutar en el momento.
También es posible preparar este menú en grandes cantidades y reservarlo para un día demasiado ocupado o que no tenga energía suficiente como para cocinar después de una jornada agitada en la oficina. Lo único que tiene que hacer es colocar las porciones de alrededor de 170 gramos en el horno durante 20 minutos y ¡voilà! ¡La cena está lista! (Aclaración: Una fuente de alrededor de 20 cm de largo llena de macarrones con queso tarda unos 50 minutos en cocinarse por completo).
3. Carne de cerdo picante desmenuzada
Advertencia: Para preparar esta receta de CookingLight.com necesita alrededor de 7 horas pero le aseguro que el esfuerzo vale la pena y sus papilas gustativas estarán más que agradecidas con el sacrificio.
Con estas instrucciones no sólo logrará que la carne de cerdo sea tierna, sino que obtendrá una exquisita salsa para acompañarla. El sitio web asegura que el cerdo y la salsa saben delicioso cuando se los recalienta (¡No hay nada peor que comer comida recalentada sin sabor!). Otra gran opción es degustarlos en una maravillosa hamburguesa hecha con bollos de pan integral. Si no es fanático de la barbacoa, puede cocinar la carne en una olla de cocción lenta utilizando la receta de la revista Good Housekeeping.
4. Pot Pie
Preferimos no ser específicos por una muy buena razón– hay miles de tartas deliciosas que pueden prepararse con anticipación y que sólo tiene meterlas en el horno y disfrutarlas. ¡Le aseguro que su yo actual felicitará a su yo de la semana anterior cuando el pot pie esté listo en medio de una semana súper agitada!
Chowhound ofrece una gran variedad de alternativas, desde usar ingredientes para pizza hasta preparar el clásico pot pie de pollo. Una vez que la tarta esté lista, guárdela en el congelador y hornéela cuando la vaya a comer. Las instrucciones de horneado varían según la receta, así que procure consultar todos los hipervínculos asociados que ofrece la página.
5. Pastel de carne de cordero (Shepherd’s pie)
Esta es una opción increíble porque no sólo es fácil de preparar, sino también muy llenadora o saciente. Good Food, el sitio web de la BBC, publicó una receta maravillosa de pastel de carne de cordero que hasta el cocinero más inexperto podrá realizar.
Una vez que esté listo, puede hornearlo durante 20 minutos más o menos o guardar el preparado sin cocinar en el congelador. Cuando desee comerlo, tardará alrededor de una hora en cocinarse si está congelado. Puede que esté muy caliente en el centro, así que espere unos 5 minutos antes de saborearlo para no quemarse la boca (¡La comida no tiene por qué ser motivo de sufrimiento!).
6. Pollo parmesano fácil
Muchas recetas de pollo parmesano implican rebozar y freír (quizás no sea la opción más saludable para aquellos que deseen mantener a raya su ingesta de calorías) pero este no es el caso de la que nos ofrece AllRecipes.com. Esta delicia horneada hecha con parmesano se prepara al estilo cacerola, con todo el sabor de un menú bien consistente.
Sólo le tomará 15 minutos prepararla y unos 35, cocinarla, a pesar de que en la página no se especifique cuánto tardará en cocinar la comida si está congelada. Sin embargo, algunos lectores sugieren que le agregue unos 40 minutos a la hora de horneado de la versión sin congelar (en este caso sería un total de una hora y 35 minutos).
7. Sopa de frijoles o alubias
TheKitchn.com asegura que no todas las sopas son aptas para el congelador. Sin embargo, el mismo sitio afirma que una de las mejores opciones para preparar con anticipación es la sopa de frijoles y lentejas. Si bien le costará un poco prepararla, valdrá la pena disfrutarla los días y semanas siguientes.
Este sitio ofrece una gran variedad de recetas de sopas de frijoles, entre las que se incluyen la de lentejas rojas, de guisantes partidos y hasta de zapallo o calabaza con tocino (en cantidades moderadas, claro). Estos menús están repletos de proteínas y pueden prepararse en forma de caldo o con una textura más consistente, similar a la del puré.