No hay nada más gratificante que cultivar y comer sus propios vegetales y frutas. Pero, ¿qué tal si produce grandes cantidades que se pueden echar a perder? Lo último que quiere es que toda esa comida acabe en la basura y más después de tanto esfuerzo.
La solución ideal para muchos es preparar conservas y enlatarlas. Si lo hace correctamente, puede extender la vida útil de sus alimentos favoritos y así tenerlos a su disposición por mucho tiempo. A continuación, le enseñamos cómo lograrlo con éxito…
1. Conozca los riesgos
Antes de comenzar, es importante que conozca los riesgos de salud vinculados con consumir comida enlatada y en conserva en mal estado. Primero y principal, sea consciente de que no tomar los recaudos necesarios puede causar botulismo, que es provocado por la toxina botulínica, que se desarrolla en áreas húmedas y libres de oxígeno.
El problema es el siguiente: el botulismo, que puede generar náuseas, vómitos, mareos, dolor de cabeza, parálisis y hasta la muerte, no afecta el color, el aroma o el sabor de los alimentos, según explica el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, según sus siglas en inglés). Así que, si no está seguro de que enlató el producto correctamente, ¡deshágase de él de inmediato!
2. Conozca los tipos de alimentos enlatados
Existen dos tipos de alimentos enlatados: los de alto contenido ácido y los de bajo contenido ácido. Los primeras presentan un nivel de acidez inferior a 4,6, por lo que deberá seguir el método del agua hervida. El ácido natural en los alimentos previene el botulismo y la proliferación de otras bacterias. Algunos ejemplos son las frutas, los escabeches y el chucrut.
Los alimentos de bajo contenido ácido son los vegetales frescos, las carnes, las sopas, la leche y las salsas para espagueti. Estos presentan un nivel de acidez superior a 4,6, por lo que se sigue el método de enlatado a presión. De otra manera, no será posible matar la bacteria que provoca el botulismo.
3. La higiene ante todo
Parte de la seguridad a la hora de preparar alimentos enlatados y en conserva es la higiene—lo que lo incluye a usted mismo, a las superficies y utensilios de cocina y a las frutas y vegetales que planea preparar. Asegúrese de lavarse las manos con jabón y agua durante medio minuto antes de comenzar.
Además, enjuague bien las frutas y los vegetales con agua tibia y potable. Procure no contaminar sus productos con carne cruda. Por último, limpie su área de trabajo con desinfectante para cocina o alguna solución segura a base de lavandina.
4. Utilice las técnicas de cocina apropiadas
Recuerde, deberá seguir el método de enlatado con agua hervida con los alimentos de alto contenido ácido y el método a presión con los de bajo contenido ácido. Si no utiliza las técnicas de cocina correspondientes, puede causar la proliferación de bacterias peligrosas y de toxinas de botulismo, que hasta pueden provocar la muerte.
También es muy importante evitar modificar los tiempos de cada proceso y los niveles de presión. Cocinar de forma segura implica controlar de forma regular las temperaturas de cocción para asegurarse de que estas no varíen de manera considerable.
5. Asegúrese de que su equipamiento cumpla con todos los requisitos
No empiece sin antes haber controlado que su equipamiento básico esté en buenas condiciones para las tareas que va a realizar. Primero, controle que los recipientes a utilizar hayan sido aprobados para procesos de enlatado y embotellamiento caseros. Segundo, sólo utilice tapas selladas al calor. Si utiliza tapas viejas, asegúrese de que el compuesto sellante esté intacto.
En cuanto a las recetas, opte por las que hayan sido certificadas para enlatar alimentos en casa. Si tiene dudas acerca de que la receta sea apta para envasado, no la use— no vale la pena poner en riesgo la salud de su familia y amigos.
6. Cuidado al almacenar los alimentos enlatados
La tarea de enlatar de forma segura sus alimentos preferidos no acaba al sellar las latas. Es clave que las etiquete minuciosamente antes de guardarlas.
No olvide anotar el tipo de comida y la fecha de envasado. Una vez que termine, guarde las latas en lugares secos y frescos, como un garaje, un galpón o una despensa. Para preservar la calidad, consuma los productos antes de que se cumpla un año de haber sido envasados.
7. Consejos para comprar alimentos enlatados en las tiendas
Esta claro que enlatar o embotellar sus propios alimentos puede ser peligroso. No tener en cuenta los cuidados apropiados puede causar enfermedades y, en el peor de los casos, la muerte. Pero, ¿cuáles son los peligros de comprar comida enlatada?
La buena noticia es que los riesgos de contraer botulismo son extremadamente bajos, debido a que los fabricantes deben cumplir con normas estrictas de procesamiento térmico, que apuntan a destruir todo tipo de bacterias dañinas. De todos modos, evite comprar latas que estén dañadas o abolladas.
8. Controle quién envasa los alimentos que compra
Cuando están bien envasados o embotellados, los alimentos en conserva son deliciosos— incluso más sabrosos que las versiones naturales. Sin embargo, es importante saber quién embotelló o enlató productos que usted y su familia están a punto de comer.
Sólo compre y consuma productos enlatados que provengan de fuentes confiables—como esa tía que ha estado envasando frutas y vegetales por décadas. Sea un poco más precavido cuando reciba productos de alguien que no tiene experiencia a la hora de enlatar y embotellar comestibles.