La inflamación es la respuesta natural del cuerpo para protegerse contra las infecciones, los virus y las bacterias extranjeras. Cuando se detecta una amenaza, el cuerpo desencadena la liberación de productos químicos y de glóbulos blancos (los cuales se encargan de combatir los gérmenes en nuestro cuerpo). Sin embargo, con ciertas condiciones inflamatorias o enfermedades auto inmunes, tales como la artritis reumatoide o la osteoartritis, la fibromialgia, la enfermedad celíaca, la enfermedad de Crohn y la esclerosis múltiple — hay respuesta inflamatoria por parte del sistema inmune incluso cuando no hay ninguna amenaza. El resultado daña los tejidos internos, provoca hipertensión arterial, hace que las articulaciones se hinchen y rigidicen dolorosamente y se fomenta el crecimiento de células anormales (es decir, las células cancerosas).
Sin embargo, evitar estos 8 alimentos puede calmar y reducir de manera importante esta respuesta inflamatoria.
1. Lácteos
No es ninguna sorpresa que más de la mitad de la población mundial sufra de intolerancia o alergia a la lactosa. De hecho, la leche y el queso de vaca han sido considerados alimentos altamente inflamatorios por la cantidad de malestar estomacal, estreñimiento, diarrea, urticaria y problemas de respiración que causan. Si sufre de intolerancia o alergias a la leche, intente cambiarla por leche de almendras, cáñamo o leche de soja orgánica.
2. Carnes rojas grasientas
Las carnes rojas con grasa — como las costillas, las hamburguesas o la carne de res molida y otros cortes de carne de res grasos — son considerados autores inflamatorios ya que son ricos en grasas animales, las cuales se han relacionado con la diabetes crónica, con enfermedades cardiacas y con cáncer en varios estudios médicos, incluso en los más recientes de la Universidad de California, San Francisco.
3. Queso
Ya he advertido acerca del queso crema, sin embargo, la investigación de la University College London confirma que 60% de la población mundial no puede digerir la leche de vaca (o más particularmente la lactosa, el azúcar principal de la leche) durante la adultez. Esto explica por qué el queso, particularmente alto en contenido de sodio y de variedad procesada, causa tanta inflamación — y los quesos naturales y duros causan menos problemas debido a las cantidades reducidas de sodio).
4. Margarina
La margarina y sus otras extensiones altas en grasas trans o en aceites parcialmente hidrogenados, mejor deben ser evitadas completamente ya que exacerban la respuesta inflamatoria. En cambio, el médico practicante, autor y profesor de medicina familiar en la Universidad de California, San Francisco, Daphne Miller, recomienda el uso del aceite de oliva o de mantequilla clarificada, como la mantequilla de búfalo, la cual es rica en ácidos grasos omega 6, pero proporciona un sabor concentrado en una pequeña cantidad en comparación con la mantequilla regular.
5. Carnes curadas y procesadas
Igual que las carnes rojas y grasosas, las carnes curadas o aquellas conservadas y procesadas usando una combinación de sal, nitratos, nitritos o azúcar para la longevidad y sabor (es decir, perros calientes, salchichas, bolonia y otras carnes frías) son conocidas como delincuentes inflamatorios que se han relacionado con enfermedades autoinmunes. Para obtener grasas saludables, intercambie las carnes procesadas por atún fresco o congelado, sardinas, o salmón, nueces y granos para un impulso de omega 3.
6. Alcohol
La próxima vez que levante un vaso de cerveza, sidra, vino o licor, considere que la Escuela de Medicina de Harvard ha vinculado durante mucho tiempo el exceso de consumo de bebidas alcohólicas con la inflamación crónica, particularmente del hígado, lo cual puede producir infartos, accidentes cerebro vasculares, enfermedades arteriales periféricas, demencia vascular y el crecimiento progresivo de tumores cancerosos.
7. Aceites vegetales
Según muchas organizaciones nutricionales reconocidas, entre las que se incluye el California’s Beller Nutritional Institute, una dieta demasiado alta en ácidos grasos omega 6 puede causar inflamación. Sin embargo, puede reducir la inflamación mediante la sustitución de aceites omega 6 (es decir, soja, girasol y alazor) con un aceite alto en contenido de omega 3 (es decir, aceite de oliva virgen extra o aceite de canola presionado).
8. Aditivos alimentarios
Durante mucho tiempo hemos escuchado las advertencias acerca de consumir una dieta rica en alimentos procesados. Una de las razones es que contienen aditivos populares, como el glutamato monosódico (MSG) y el aspartamo que, según estudios del Centre for Asthma and Respiratory Diseases de la Universidad de Newcastle en Australia, se han relacionado con agravantes síntomas inflamatorios en aquellas personas con enfermedades existentes (es decir, asma crónica).