La sequedad cutánea y capilar es un tipo de molestia común que afecta a hombres y mujeres de todo el mundo. Las causas son diversas y cada vez son más los comerciantes que aseguran tener la receta perfecta para reparar las áreas afectadas, aunque casi siempre es muy alto el precio a pagar y muy pocas veces los resultados son los esperados. Además, no todos responden de la misma manera a ciertos tratamientos; algunos hasta acaban con inconvenientes mucho peores como exceso de grasa capilar y dérmica, alergia y hasta irritación. No obstante, es posible revertir la situación con ayuda de preparados caseros y de productos cosméticos, al igual que con ciertos cambios en el estilo de vida y en los hábitos de higiene.
Si está harto de malgastar su dinero en tónicos milagrosos y en cremas hidratantes, anímese a seguir estos diez consejos y verá cómo su piel y su cabello vuelven a la vida de inmediato…¡inténtelo!
1. Evite tomar duchas muy calientes
Una ducha bien caliente es la manera perfecta de ponerle fin a un día de trabajo agotador. Lo ayuda a relajar sus músculos, disminuye los niveles de estrés y hasta mejora su humor. Sin embargo, los beneficios no vienen solos, ya que la temperatura del agua puede ser uno de los motivos por los que su piel y su cabello están resecos.
El agua caliente acaba con aceites naturales que mantienen su piel suave e hidratada y hace que ésta adopte un aspecto opaco y hasta escamoso. De la misma manera, su cabello sufre las consecuencias del agua casi hervida de su baño relajante y se vuelve seco y quebradizo. Por mucho que le cueste, le recomendamos optar por baños de agua tibia. ¡Hágalo por sus rizos dorados!
2. Disminuya la temperatura de aparatos para el cabello
Secadores de cabello, planchas eléctricas y rizadores. Estoy segura de que es dueño de al menos uno de los anteriores. No es novedad que estos artefactos sean los principales causantes de la resequedad capilar, debido a que las temperaturas que alcanzan son altísimas; de hecho, algunos superan los 150 grados Celsius.
La capa más externa de su cabello contiene una cutícula compuesta por proteínas que lo protege de los daños. El uso excesivo de estos aparatos destruye esa cutícula y hace que su melena se vea opaca y débil. Una buena solución es tomarse unos minutos adicionales antes de salir y secarse el cabello en temperatura media o baja. Reducir la frecuencia de uso es igual de efectivo. ¡Haga la prueba!
3. Busque el tipo de humectante o hidratante apropiado
Encontrar el humectante o hidratante apropiado para su cuerpo puede ser bastante abrumador. Las opciones son ilimitadas; de día, de noche, antiarrugas, correctivas, aromatizadas con extractos de cacao y manteca de karité, enriquecidas con vitaminas, aceites esenciales y ácidos grasos y reforzados con filtros UV. En fin, si hay algo que debe recordar es que las cremas oleosas son ideales para tratar la sequedad cutánea.
Según la Clínica Mayo, los productos a base de aceite son muy efectivos para tratar estas molestias. Este tipo de cremas retiene más humedad que otras y sus efectos son más duraderos. No obstante, pueden empeorar la situación de aquellos con piel grasa, en particular en la zona del rostro. Si este es su caso, limite el uso de las cremas oleosas a su cuerpo y busque otras alternativas para el rostro.
4. Tome duchas más cortas
Además de la temperatura, la duración de sus duchas puede afectar tanto su piel como su cabello. Como dijimos anteriormente, el agua caliente acaba con los aceites protectores que retienen la humedad y, por tanto, fomentan la hidratación. Si desea tomar un baño relajante, opte por usar agua tibia para no dañar su piel.
Su cabello se ve más afectado aún por esta situación; incluso el agua tibia puede causar resequedad. Le recomendamos que tome baños de no más de 10 ó 15 minutos y notará una gran diferencia. Otra solución viable para los que no quieren renunciar a sus duchas relajantes es no sumergir su cabeza en el agua o proteger su cabellera con un gorro de baño.
5. Huméctese o hidrátese con frecuencia
Por lo general, se necesita más que un cambio de estilo de vida para tratar y prevenir la resequedad. Esta molestia se vuelve aún más común en los meses de frío, especialmente si vive en lugares en los que las temperaturas llegan a ser bajo cero. De la misma manera, quienes habitan en zonas secas y calurosas también sufren las consecuencias de la falta de hidratación. Lo importante es disponer de una buena loción o crema y aplicársela con frecuencia.
Los mejores momentos para humectarse o hidratarse son a lo largo del día y después de ducharse, ya que así facilita la retención de humedad. Es importante tener a mano en su oficina o en su bolso algún producto humectante, debido a que al lavarse constantemente las manos, ya sea antes de comer o luego de ir al baño, es común que la piel se reseque.
6. Aliméntese bien y beba mucha agua
Puede que no le resulte muy obvio el hecho de que lo que come y la cantidad de agua que consume impacten en la salud de su cabello, pero en realidad sí lo hace. De la misma manera en que aparecen manchas blancas en sus uñas cuando carece de algún nutriente, su cabello también puede hacerle notar las deficiencias, debido a que está formado por proteínas. Por eso, resulta esencial alimentarse de forma equilibrada.
Algunas dietas que suprimen grupos alimenticios completos fomentan la resequedad y la caída del cabello. Este problema suele ser muy común entre pacientes que sufren de desórdenes alimenticios, debido a que ingieren muy pocos alimentos y los pocos nutrientes presentes en el cuerpo son destinados a los órganos vitales. Por otro lado, beber mucha agua promueve tanto la hidratación de su cabello como la del resto de su cuerpo.
7. Use el tipo de jabón apropiado
La gran cantidad de productos para el cuidado de la piel es una bendición y, a la vez, un problema. Lo negativo del asunto es que hay tantos para elegir que tendrá que informarse antes de tomar una decisión; por ejemplo, algunos jabones son tan fuertes que remueven los aceites naturales que mantienen hidratada la piel. Es importante buscar la fórmula correcta que lo proteja y que deje su piel suave y tersa.
Lo primero que debe hacer es leer los datos presentes en el envase. Las variedades sin perfume e hipoalergénicas son ideales para aquellos que padezcan resequedad, enrojecimiento y hasta sarpullidos como consecuencia de los químicos dañinos que algunas marcas utilizan. Los geles de baño con aceites esenciales que nutren su piel y ayudándola a retener la humedad. Evite los jabones antibacteriales, debido a que resultan muy dañinos para ciertos tipos de pieles. Recuerde que todos los jabones tienen sus pros y sus contras, lo importante es encontrar el que mejor se adapte a sus necesidades.
8. Lávese menos el cabello
Los aceites naturales y proteínas que protegen su cabello y le dan brillo y vitalidad suelen verse dañados por factores tales como la frecuencia con la que se lo lava. La manera más natural de solucionar el problema es lavarse menos el cabello. Con cada lavado se deshace de aceites esenciales que, créase o no, son súper beneficiosos.
Dichos aceites lo ayudan a prevenir la resequedad, por lo que se recomienda limitar los lavados a 2 ó 3 veces por semana. Las personas con cabello graso pueden usar un champú en seco para el resto de los días. Otro plus de disminuir la frecuencia de lavado es que su melena será más fácil de manejar y los productos que se aplique para alisar o dar forma serán más efectivos.
9. Fabrique su propia máscara facial
Es probable que muchos de los productos que tiene en su alacena o despensa puedan ser utilizados para fabricar una mascarilla simple pero efectiva para combatir la piel seca. Muchos de los ingredientes de las mascarillas caseras pueden hacer que su piel se vea mejor que nunca. La mayoría contiene no más de cinco elementos y le permitirá ahorrar más de unos cuantos centavos.
Entre los ingredientes más comunes se incluyen bananas, yogur, avena o aguacates. Otros alimentos muy comunes en la preparación son la miel y los huevos. Los aguacates son muy eficientes a la hora de tratar la resequedad, ya que están repletos de aceites naturales. También es posible reemplazar los aguacates por aceite de oliva en su mascarilla. ¡Inténtelo y no se arrepentirá!
10. Cree sus propios tratamientos capilares
Los fanáticos de Pinterest saben muy bien de lo que hablo cuando me refiero a crear nuestros propios productos de belleza. Por desgracia, muchas personas gastan mucho dinero en arreglos ‘superficiales’ cuando tienen lo que necesitan al alcance de la mano.
Los aguacates son universales y no sólo son deliciosos, sino que son súper útiles en los tratamientos de belleza. Esta fruta mezclada con huevo es capaz de revitalizar el cabello dañado gracias a los nutrientes que combina la mezcla, entre los que se incluyen ácidos grasos y vitaminas. También puede utilizar solo la yema del huevo como acondicionador. Otros trucos fáciles para reparar el cabello seco es frotarlo con un poco de manteca. Aplíquese cualquiera de estos tratamientos de 15 a 20 minutos y luego enjuáguese bien. ¡Sentirá que acaba de salir de la peluquería!