¿Alguna vez se preguntó por qué tantas personas con ocupaciones tan diferentes practican yoga? Según Ginevra Liptan, una especialista en fibromialgia oriunda de Oregón, “el yoga es una de las medicinas más efectivas que existen,” por lo que ella suele recomendárselo a sus pacientes con frecuencia.
Echémosles un vistazo a las seis enfermedades crónicas que pueden tratarse con ayuda del yoga…
1. Trastornos de ansiedad
Los trastornos de ansiedad y los problemas vinculados con el estrés tienen algo en común— el hecho de que afectan el sistema nervioso parasimpático. Las variedades más tranquilas de yoga, como el hatha, el regenerativo y el yin le permiten bloquear dichos efectos negativos.
Según los expertos en medicina integral de la clínica Cleveland, el yoga también ayuda a las personas a conectarse con el presente. A través de la meditación, de conciencia física y de ejercicios guiados de respiración, la mente aprende a alejar las preocupaciones externas y se posiciona en el hoy.
2. Problemas cardiacos
No hay lugar a dudas de que meditar y hacer ejercicios de respiración lo ayudan a mejorar la salud cardiaca. Los investigadores del Centro Médico de la Universidad Erasmo de Róterdam revelaron que el yoga beneficia considerablemente el corazón.
Dicho grupo de investigadores concluyó que el yoga— a diferencia de otras actividades físicas— dispone de la “trifecta poderosa” de asanas lentas (o posturas), meditación con respiración y relajación que calma el cuerpo y reduce la presión arterial y las tensiones.
3. Problemas para dormir
Si sufre de insomnio, una serie de estudios ha logrado demostrar que el yoga es su mejor aliado para dormir. Una investigación publicada en 2004 por los National Institutes of Health demostró que el insomnio crónico puede tratarse de forma efectiva con ejercicios de yoga.
Cualquier tipo de ejercicio mejora los patrones de sueño de forma considerable. Sin embargo, los expertos notaron que quienes practicaban yoga dormían más y mejor y se despertaban menos por la noche.
4. Cáncer
Una investigación llevada a cabo por el Centro Médico de la Universidad de Maryland reveló que el yoga puede usarse como tratamiento complementario en pacientes con cáncer. Un estudio en particular de la Universidad de Maryland analizó a 68 mujeres con cáncer de mama.
Los resultados demuestran que quienes practicaban yoga con frecuencia sufrían menos ansiedad y depresión que el resto. Los investigadores también notaron que los efectos negativos de la radioterapia también se reducían considerablemente.
5. Inflamación
Si padece inflamación crónica, los investigadores demuestran que las sesiones suaves de yoga alivian el dolor y aplacan la inflamación. Un estudio llevado a cabo por el Instituto de Investigación de Medicina Conductual de la Universidad Estatal de Ohio analizó los efectos de una sesión de 90 minutos de yoga en un grupo de individuos durante tres meses.
Los resultados revelaron que el yoga— si se realiza dos veces a la semana durante tres meses— permite reducir la inflamación en un 20 ó 25% en pacientes con cáncer de mama, enfermedades cardiacas y artritis.
6. Artritis
Los profesionales de la salud de todo el planeta coinciden con que el yoga alivia la artritis crónica— ya que reduce la inflamación, el estrés y la depresión vinculados con el manejo de enfermedades crónicas.
De hecho, una investigación de la Universidad Johns Hopkins reveló que el yoga mejora la salud mental, la función articular y el bienestar emocional general de los pacientes.