Últimamente se ha vuelto muy común que la medicina alternativa trabaje en conjunto con la tradicional. Este tipo de tratamientos más naturales intenta lograr el equilibrio general del organismo, en lugar de atacar sólo los síntomas. Para algunas personas ha resultado ser más que eficiente a la hora de aliviar el dolor y las molestias provocados por distintas enfermedades y lesiones. Los enfoques holísticos y naturales suelen ser una segunda opción cuando la medicina clásica no puede dar ciertas respuestas. Si lo que busca es darle un giro a su vida, considere los siguientes diez nuevos conceptos en medicina natural…
1. Osteopatía
La osteopatía trata y refuerza su organismo completo, no sólo la lesión o la parte afectada. Este enfoque intenta devolverle el equilibrio natural, ya que se basa en la idea de que el cuerpo puede sanarse por sí mismo; además, al tratar distintas áreas, fomenta la auto-reparación. Los expertos se forman durante años para aprender a detectar desequilibrios.
Se trata de una práctica alternativa muy interesante, debido a que los médicos pueden identificar qué áreas y órganos no funcionan de manera apropiada sin necesidad de someterlo a pruebas médicas estándar como rayos X y ultrasonidos. Si bien no es invasivo, los osteópatas usan sus manos y sus dedos para encontrar problemas y presionar en los lugares que requieren mayor atención. Incluso después de la primera sesión se sentirá más relajado y en paz.
2. Médico naturopático
En muchos casos, las personas recurren a un naturopático cuando sus médicos de cabecera no logran diagnosticar o reparar el problema después de someterse a distintos exámenes y pruebas. Es una de las tendencias más populares de medicina alternativa y puede aliviar hasta las enfermedades más severas, en especial aquellas que producen muchísimo dolor. Si bien no suele ser el primer recurso al hablar de tratamientos, se lo considera una forma de prevención proactiva.
Los naturopáticos se forman para ayudar a los pacientes a cuidar su salud y a tomar decisiones más apropiadas en cuanto a estilo de vida según su situación particular. Este enfoque se basa en el concepto de guiar al organismo por el camino de la buena salud. Ya sea porque padezca alguna afección, porque desee mejorar su salud general o porque quiera reducir los riesgos de desarrollarlas en el futuro, los naturópatas pueden facilitarle un plan que sólo incorpore técnicas naturales.
3. Masajistas terapeutas
Esta forma de medicina alternativa es muy popular y muchos expertos la recomiendan por sus beneficios ampliamente comprobados. Es súper versátil y sirve para tratar enfermedades leves y crónicas. De hecho, alivia el estrés, las contracturas, los episodios de migraña y el dolor de aquellas lesiones causadas por accidentes automovilísticos o laborales, entre otros tantos males. El terapeuta apunta directamente a las zonas afectadas y a otras áreas asociadas que contribuyen con el dolor.
Muchas personas están familiarizadas, al menos, con un tipo de tratamiento, generalmente con el que el masajista aplica distintos grados de presión con las manos, el antebrazo y hasta con los codos. No obstante, hay miles de técnicas diferentes que van desde el tradicional masaje hasta el que incorpora piedras calientes que se colocan en los puntos más problemáticos. De la misma manera, existen diversos cursos y capacitaciones que les permiten a los terapeutas especializarse en una técnica particular, como masajes de tejidos suaves o tratamientos para deportistas.
4. Acupuntura
La popularidad de la acupuntura no deja de aumentar por una muy buena razón. Al igual que los masajes terapéuticos y la naturopatía, la acupuntura es una forma alternativa de tratar problemas de salud y de mantenerlos bajo control. Un acupunturista se encarga de colocar agujas delgadas en áreas específicas del cuerpo. A muchos les aterra o les incomoda la idea de usar agujas pero se insertan tan rápido que ni siquiera tiene tiempo de sentir dolor.
Las agujas se aplican en puntos estratégicos, según lo que busque tratar el acupunturista. Según la Clínica Mayo, dichos puntos son una forma de equilibrar el flujo de energía en el organismo. Actualmente, los expertos en acupuntura de Norteamérica aseguran que estos puntos estimulan nervios, músculos y tejidos conjuntivos. Más allá de la importancia que sigue teniendo la medicina tradicional, muchos se han beneficiado con la acupuntura, especialmente a la hora de aplacar dolores crónicos y náuseas.
5. Quiropraxia
Los quiroprácticos tratan determinadas enfermedades asociadas con la columna vertebral, las terminaciones nerviosas y las articulaciones. Manipulan o ajustan áreas que causan o que empeoran el dolor de espalda, los espasmos musculares, los calambres y los problemas de articulaciones; tienen como objetivo mejorar el funcionamiento articular, aplacar el dolor y eliminar la inflamación. Junto con la manipulación, los quiroprácticos incorporan hielo, calor, masajes y estiramiento o le recomiendan ejercicios al paciente para que los lleve a cabo en su hogar. Es posible que los especialistas incorporen mecanismos de estimulación eléctrica u otros elementos especiales para completar el tratamiento.
Por lo general, muchos no se sienten cómodos con la quiropraxia debido a que les aterra la idea de que se manipulen áreas tan delicadas como el cuello y la espalda. Si bien muchos expertos acomodan las vértebras de los pacientes por medio de presión, otros optan por un activador, que no requiere manipulación. Algunos eligen un solo método aunque hay otros que prefieren combinar ambos. Esta técnica menos invasiva ha beneficiado a muchísimas personas, así que ¡no deje de intentarlo!
6. Reflexología
Se sabe muy poco acerca de lo que hay detrás de la reflexología en comparación con otras formas de medicina alternativa. Es otra práctica natural a la que se suele recurrir cuando no se ven mejoras con la medicina tradicional. Un reflexólogo aplica presión en puntos específicos en las manos, pies y orejas (en algunas ocasiones). Estos puntos están asociados con órganos y partes de todo el cuerpo. Se cree que dicha presión sobre los reflejos provoca una reacción positiva que fomenta el flujo de energía del organismo.
La reflexología ha demostrado ser eficiente a la hora de aplacar el dolor y los niveles de estrés y ansiedad. Existe cierta controversia acerca de si los reflexólogos pueden tratar enfermedades tales como asma y diabetes. No se dispone de evidencia científica suficiente para afirmarlo pero sí hay muchísimas razones para recomendar la reflexología. Si bien es necesario llevar a cabo más investigaciones para comprobar sus beneficios, está de más decir que ha ayudado a muchas personas.
7. Homeopatía
Los médicos homeópatas han optado por seguir el mismo procedimiento que el de los médicos tradicionales; analizan su historia clínica, lo interrogan acerca de sus síntomas y lo examinan. Se diferencian al dar un paso adelante al intentar conocer más acerca de la vida de sus pacientes y de cómo les afectan los síntomas (más allá de lo físico). Estos especialistas se esfuerzan por obtener un panorama completo de sus pacientes – tratan de estudiar su salud a todo nivel, desde relaciones personales hasta patrones de sueño, hábitos alimenticios y capacidad mental — a fines de poder brindar un diagnóstico preciso y decidir cuál es el mejor tratamiento a seguir.
Los remedios homeopáticos están hechos a partir de ingredientes naturales que apuntan a que el organismo se sane a sí mismo. El foco del tratamiento no es concentrarse en un síntoma específico — en cambio, se busca identificar la base del problema. Al fortalecer las defensas naturales, el organismo se vale de su propia sabiduría y de sus habilidades para sanarse sin contar con los efectos secundarios de los medicamentos tradicionales. En algunos países europeos la homeopatía se ha vuelto tan popular que ha dejado de considerarse una práctica alternativa.
8. Ayurveda
Constituye una de las formas más antiguas de medicina holística e hindú y hace ya unos años se ha establecido en la sociedad occidental y en el resto del mundo. Si bien el foco del ayurveda ha despertado aún más incredulidad entre los escépticos, se sabe que ha beneficiado a muchísimas personas. Consiste en evaluar el impacto y la interacción del organismo con cinco elementos; el éter, el aire, el agua y la tierra. La meta máxima es armonizar las energías elementales dentro de su cuerpo y de su vida.
Este enfoque identifica los puntos fuertes y débiles de su cuerpo en relación con cada elemento y llena esos vacíos al efectuar cambios en su vida, ya sea en su alimentación, en sus relaciones, en su profesión, en su estilo de vida y hasta en el lugar en donde vive. Un experto en ayurveda le ofrece lo que se conoce como ‘análisis de la enfermedad’ y realiza una investigación profunda de cada aspecto de su vida. Luego elabora un diagnóstico preciso y define su tratamiento. En otras palabras, intenta reforzar las partes elementales saludables de su cuerpo para lograr sanarlo y equilibrarlo. Compuestos herbales, masajes, desintoxicación y modificaciones en su dieta son algunos elementos que forman parte de este tipo de tratamientos.
9. Reiki
El reiki es una práctica espiritual que transfiere lo que se conoce como ‘energía vital universal’ al paciente. Se trata de otra forma de medicina alternativa en la que no todos creen pero que ha ayudado a individuos de todo el mundo a mejorar su calidad de vida y su salud. Esta transferencia se realiza por medio de las manos y la cantidad de energía que se traspasa depende de la situación particular del paciente. Aquellas personas con niveles bajos de energía vital son propensos a padecer enfermedades físicas y mentales mientras que los que tienen niveles elevados son capaces de triunfar en todo lo que se propongan.
El reiki les permite a los pacientes relajarse y estar en paz y no necesita ser una persona espiritual para obtener las virtudes del tratamiento. Los maestros del reiki les enseñan a sus aprendices a impulsar su energía vital para poder sanar a otros. Se dice que es muy efectivo a la hora de disminuir los niveles de estrés, un factor sumamente debilitante para el organismo. Esta práctica se ha vuelto tan popular alrededor del mundo que es posible encontrar maestros de reiki y expertos en cualquier rincón del planeta.
10. Aromaterapia
Puede que alguna vez haya oído hablar acerca de la aromaterapia y la asocie con aromatizantes que se consiguen en cualquier tienda del centro comercial. Un experto en aromaterapia combina aceites para facilitar el proceso de sanación del organismo. Dichos aceites están compuestos de distintos elementos como hierbas, flores, especias y plantas. Se supone que cada ingrediente contiene la energía del lugar en el que se originó. Es por esto que tienen la habilidad de estimular y de reforzar el proceso de auto-sanación del cuerpo.
La aromaterapia suele combinarse con otras prácticas naturales. Según la Federación de Aromaterapeutas de Canadá, para poder obtener un certificado profesional es necesario estar muy bien formado en áreas como anatomía y fisiología y se deben conocer en detalle las propiedades de los distintos aceites esenciales y su aplicación en la salud. Es posible certificarse en diversos sitios del mundo, ya que la aromaterapia se ha convertido en una práctica universal.