Al estar todos tan pendientes de las redes sociales, se vuelve muy difícil encontrar verdadero tiempo para estar a solas. Entre compromisos laborales, obligaciones familiares y reuniones sociales, ¿cuándo fue la última vez que pudo conectarse con su yo interno sin que nadie más lo interrumpiera? Diversos estudios aseguran que, si bien aislarse de los demás puede impactar de forma negativa en su salud (ya que puede desencadenar en depresión o en enfermedades cardiovasculares), encontrar algunos espacios para estar solo en la semana fomenta el bienestar de las siguientes seis maneras…
1. Así se revitalizan los introvertidos…
Si es de los extrovertidos, es probable que se llene de energía en reuniones sociales repletas de personas. No obstante, los introvertidos se agotan un poco al pasar tiempo con otros y necesitan sus momentos a solas para recuperarse de tantas emociones.
Un famoso psiquiatra llamado Carl Jung descubrió que aquellos con tendencia a la abstracción se sienten más vulnerables en ambientes demasiado estimulantes, ruidosos y llenos de gente. Sólo deténgase a observar las actitudes de los individuos introvertidos durante una gran reunión; por lo general, necesitan dar un paseo en compañía de ellos mismos o sentarse a leer un buen libro.
2. Aclara su mente
Una investigación publicada en la revista Psychology Today y llevada a cabo por la autora y doctora en Psicología, Sherrie Bourg Carter, sugiere que los momentos de soledad ayudan a aclarar la mente — sea o no introvertido.
La Dra. Carter explica que “estar constantemente en modo ‘encendido’ le quita la posibilidad al cerebro de descansar y reponerse.” No obstante, tomarse unos minutos para alejarse de las distracciones es clave para procesar y contemplar de manera objetiva ciertas situaciones, al igual que para rejuvenecer el cuerpo y la mente.
3. Fomenta la creatividad
No, no hace falta estar rodeado de personas para que se le ocurran las ideas más increíbles. De hecho, una investigación llevada a cabo por psicólogos de la Universidad de Washington en St. Louis asegura que los mejores proyectos surgen de la individualidad.
Este estudio no sólo reveló que las personas son más creativas cuando están solas, sino que también es más eficiente pensar en soledad y luego compartir las ideas con los demás.
4. Reduce los riesgos de padecer depresión en adolescentes
Si bien el tiempo a solas es esencial a cualquier edad para fomentar la salud y el bienestar emocional, un estudio realizado en 1997 por Reed W. Larson, un experto en desarrollo emocional y profesor de Desarrollo Humano y Comunitario en la Universidad de Illinois, en Urbana-Champaign, reveló que los adolescentes que pasan una cantidad de tiempo moderada a solas son menos propensos a deprimirse que los que no se dedican tiempo a sí mismos.
En su estudio, Larson monitoreó durante una semana la compañía y los estados de conciencia subjetivos de un grupo de 483 jóvenes que cursaban entre quinto y noveno grado. Después de analizar los resultados, se llegó a la conclusión de que en los de séptimo, octavo y noveno grado, la soledad tenía un impacto positivo en su estado emocional y que estos “retiros estratégicos brindaban un estímulo positivo para las experiencias sociales que atravesaban a diario.”
5. Fomenta la creación de nuevos vínculos
Pregúntele a su vecino solitario por qué nunca sale de casa y es probable que le responda que no lo hace porque no tiene con quién compartir sus intereses personales. No hay excusas válidas para no salir a buscar personas con gustos y pasatiempos parecidos a los suyos, según Rebecca Ratner, una docente especialista en negocios de la Universidad de Maryland.
Llevar a cabo alguna de sus actividades favoritas (como ver una obra, viajar, leer poesía, tomar clases de cocina o unirse a un grupo de excursionistas) por su cuenta le permitirá encontrar cientos de amigos que compartan sus mismos intereses. Deje de pensar que está solo y saque provecho de la situación. ¡Diviértase!
6. Mejora la productividad
¿Cuándo fue la última vez que hizo una presentación grupal en el trabajo o en la universidad? Estoy segura de que no todos sus compañeros trabajaron de forma equitativa y, hasta puede que hayan dejado que un solo individuo hiciera todo el trabajo. Si se siente culpable de lo que se conoce como “holgazanería social”, créame que no es el único.
Según un grupo de investigadores de la Universidad de la Commonwealth de Virginia, los holgazanes sociales se caracterizan por ser individuos que, en actividades grupales, tienden a esforzarse menos que el resto de los integrantes. Los proyectos grupales tienden a facilitarles las excusas a los individuos desmotivados para que se opaquen, ya que otros se encargan de tomar las riendas. En cambio, los proyectos individuales fomentan la productividad y la eficiencia, debido a que cada persona es calificada por sus propios esfuerzos.